"La motivación necesita valor, disciplina, control y gestión del tiempo"
Valor, disciplina, control y gestión del tiempo. Son las cuatro herramientas que el alpinista Carlos Pauner ha utilizado a lo largo de su vida para recuperar la motivación.
Lo Bajo el epígrafe “El valor de la Motivación”, el alpinista aragonés ha explicado a los asistentes la necesidad de no perder la motivación en sus proyectos de vida. Así, Pauner ha apuntado a cuatro momentos de su carrera como alpinista en los que perdió la motivación, por diferentes motivos, y cómo logró recuperarla.
Lo primordial, ha señalado, es “conseguir que tu trabajo sea lo que te guste hacer de verdad, que ir a trabajar no se convierta en una obligación”. En este sentido, Pauner ha explicado que desde pequeño sintió pasión por la química gracias a un juego que le regaló su abuela. “Me abrió un mundo que desconocía y surgió una chispa en mí”. Así, Pauner estudió Químicas en la Universidad de Zaragoza y llegó a ser director de un laboratorio. Sin embargo, durante su adolescencia, las montañas también “encendieron esa chispa”. Y lo que empezó como una pasión acabó siendo su profesión. “Era mi carga de motivación, me preparé y me esforcé para conseguirlo y finalmente logré que mi trabajo fuese lo que más me gustaba hacer”, ha explicado.
Sin embargo, el alpinista ha reconocido que a lo largo de su carrera ha tenido momentos de desmotivación, todas ellas causadas, ha señalado, por diferentes situaciones emocionales: desorden, exceso de confianza, miedo y pereza.
En cuanto al miedo, Pauner ha explicado que fue lo que le desmotivó tras un “año horrible” en su carrera, el 2009, cuando se rompió las costillas y perdió a varios compañeros y amigos. “Vi claro que tenía que cambiar y dar un salto hacia delante”. Es aquí donde entra el valor para volver a recuperar la motivación. “Me hice un listado de montañas que me quedaban por hacer y me marqué el Anapurna como meta, el valor me ayudó, fue mi carga de motivación”, ha señalado.
Respecto a la pereza, el alpinista ha asegurado que apareció cuando se planteó subir el Gashherbrum. “Era una cima con muy malas condiciones meteorológicas, sin aclimatar, sin compañeros, no tenía la motivación suficiente”, ha indicado. Frente a ello, puso sobre la mesa la disciplina. “Fue la hora de calzarse el traje de faena y empezar a trabajar, dejando a un lado la pereza”.
El Broad Peak, o K3, fue la montaña del “desorden”. Esta cima se le resistió a Pauner en más de una ocasión, era su espina clavada. “No hice una buena gestión del tiempo y decidí darme un año para prepararme, me quité ese lastre, focalicé y fui a por ello”, ha añadido.
Respecto a la última de estas emociones desmotivadotas, el exceso de confianza, Pauner ha reconocido que fue lo que le sucedió en su ataque al Lhotse. “Después de una gran cumbre pensé que iba sobrado, no estuve alerta y estuve a punto de perecer”. A este respecto, Pauner ha señalado que es importante el control, escucharse a uno mismo y “ser consciente de tus propios indicadores”.
Sin embargo, Pauner ha señalado que por encima del valor, la disciplina, la gestión del tiempo y el control, hay una conducta, transversal a todas ellas, para no perder la motivación: los sueños. “Las personas tienen que tener esa herramienta, que es el sueño para estar motivados en los proyectos que hacen. Es lo que nos van a permitir ser felices y sentirnos vivos”, ha finalizado.
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Zaragoza, 12 de noviembre de 2014
Carlos Pauner - Himalayista.
Carlos Pauner es uno de los alpinistas españoles más reconocidos a nivel mundial ya que desde hace más de una década se ha dedicado profesionalmente al himalayismo con el proyecto 14ochomiles situando a Aragón, país de montañas, en la cumbre. Es Licenciado en Ciencias Químicas por la Universidad de Zaragoza. Máster en Gestión Medioambiental y Evaluación de Impacto Ambiental por la Universidad Politécnica de Madrid. Además Carlos Pauner es Piloto Privado y Piloto Comercial licencias obtenidas en Cuatro Vientos, Madrid. Socio y piloto privado de la empresa de aviación Aeronia desde el año 2008.
En la actualidad y desde que en el año 2013 finalizara con éxito su proyecto en el Himalaya constituye y entra a formar parte de la empresa “Forjando Líderes”, empresa de consultoría y formación, en la que trabaja activamente desarrollando team building, acompañamientos outodoor y conferencias para empresas así como en programas de liderazgo y conferencias motivacionales para jóvenes.
Ha puesto en marcha su proyecto humano más importante la Fundación Carlos Pauner, una entidad sin ánimo de lucro cuyo firme propósito es el de cooperar para el desarrollo, contribuir en la mejora de la calidad educativa y el de difundir el valor del esfuerzo, a través del ejercicio del deporte, para la forja del carácter, entre los colectivos y territorios más desfavorecidos. Y está trabajando en su próximo proyecto alpinístico, 7 Cimas, “The 7 Summits”.