"La diferenciación de producto se basa en crear una percepción por parte del consumidor que lo diferencia claramente de los productos comercializados por la competencia"

Alfredo Martínez
Secretario General de AIRBUS

   
“Una gran empresa para un gran mercado” afirmó Alfredo Martínez, de Airbus. Esta compañía dispone de más 9100 aviones vendidos y más de 300 clientes, en la actualidad, tienen seis años de producción vendida y pendiente de entregar. “Somos una compañía que hemos vivido el hecho de la diferenciación muy de cerca”, continuó explicando el ponente. El competir hoy en día en el mercado no se hace sin tener unas pautas de diferenciación.

“No me gusta hablar de la crisis, a la crisis hay que plantarle cara trabajando” dijo Alfredo Martínez, además estableció que actualmente han levantado el pie del acelerador, han decidido parar un poco el incremento de los rates de producción. Esto ha producido una rápida reacción en los clientes, ya que han acudido a la compañía a proveerse de los aviones que necesitaban. A pesar de la coyuntura actual sus previsiones son optimistas al tener una cartera tan alta.

En relación con su principal empresa competidora, Boeing, afirma que tener un competidor en el mercado es bueno, les hace mejorar y los clientes adquieren mejores productos. Además si estuvieran ellos solos en el mercado no podrían satisfacer la demanda y se produciría un incremento de la inflación. Desde hace cinco años la cuota de mercado de Airbus es aproximadamente el 50%.

La diferenciación de producto es “algo básico en la estructura empresarial” apuntó Martínez, es una estrategia de marketing, basada en crear una percepción por parte del consumidor que lo diferencia claramente de los productos comercializados por la competencia. Y de esta manera satisfacer las necesidades del cliente, adaptándose a lo que se está demandando o bien generar demanda a través de la diferenciación. Todo ello a través de la innovación, ya que sólo con ella son capaces de conseguir y mantener los liderazgos empresariales. El hecho de innovar en el sector aeronáutico no consiste en tener grandes ideas, no se basa en la publicidad, proviene de actividades de investigación y desarrollo de forma decidida, estructurada, gestionada y generalmente apoyada por las Administraciones Públicas.

Alfredo Martínez explicó dos procesos de innovación que culminaron con éxito, uno es la incorporación de fibra de carbono como salto tecnológico para la compañía y el avión modelo A380, que es el avión comercial más grande del mundo, y ha sido claramente un factor innovador.

Ha habido cambios en la sociedad que han favorecido la expansión del sector aeronáutico, en especial en lo relativo a los vuelos comerciales, como es el aumento de capacidad de compra de los consumidores, que conlleva a que la población vuele más y la migración de la población de las zonas rurales a las ciudades, se prevé que en el año 2015 haya treinta y tres mega-ciudades.

La diferenciación en la protección del medioambiente ya prácticamente no lo es, “y esto es bueno” apunta Alfredo Martínez. Disponen de una fábrica para reciclar materiales, bien para que se reciclen o para que puedan volver a ser aprovechados. Hoy por hoy están consumiendo menos de tres litros de fuel por persona cada 100 km, y menos de 75 g. de CO2 por persona cada kilómetro. Además han hecho un esfuerzo en lo relativo con el exceso del ruido.

 

Terminó la exposición con una rueda de preguntas que le traslado Carmen Yorno. A través de ellas Alfredo Martínez pudo comentar como trabajan para mejorar el consumo del combustible, así como la relevancia de trabajar con el factor humano, estar cerca de las Universidades ya que éstas son “un apoyo importante a las industrias como centros de investigación”.

Turno de preguntas