Ferran Adrià.
Premio de Honor EMPRESA 2005
En esta ponencia, expondré una serie de ideas, experiencias, con el fin de que alguna palabra, frase de las que diga os pueda servir para mejorar la competitividad de vuestras empresas.
En primer lugar, decir que la mejor empresa es aquella que tiene mejor equipo, pero también hay que decir que no es fácil encontrarlo.
En 1987, un cocinero francés dijo en una conferencia como esta que la creatividad era “no copiar”. Lo cierto es que es una reflexión muy sencilla, pero la que mejor define a la palabra creatividad.
Decíros que yo, Ferrán Adría, soy un empresario muy atípico: no me gustan especialmente los negocios, sino que hago negocios para comprar mi libertad creativa, una libertad económica que te permite hacer las cosas como quieres.
La hostelería es un mundo muy difícil en el sentido de que existe una inmediatez absoluta. Esta inmediatez la traslado a mi colaboración con las empresas exigiendo tratar con el último nivel decisor para colaborar con ellas. Este es un problema que tienen muchas multinacionales, que la creatividad, el I+D está muy lejos del Consejo de decisión.
Hay que preguntarse el porqué de las cosas y dar soluciones inmediatas, en muchas ocasiones son soluciones de sentido común, pero siempre con trabajos muy intensos de búsqueda antes de tomar las decisiones.
A continuación les expondré una experiencia como consultor de una cadena hotelera:
Trabajando como consultor de una gran cadena hotelera me pregunté el porqué de los restaurantes en los hoteles de tres y cuatro estrellas, y llegue a la conclusión de que no eran necesarios, porque la gente necesita inmediatez. Lo que les propuse fue una sala vip parecida a la de los aeropuertos en la que se pueda comer muy sencillo. Esto tan sencillo era la innovación que la empresa necesitaba, y es que la creatividad normalmente es muy sencilla.
La creatividad en la restauración es algo muy importante, ya que el sector de la alimentación representa el 22% del P.I.B. español.
Para terminar les hablaré un poco de cocina diciendo en primer lugar que la cocina de mi restaurante, “El Bulli”, es una cocina de vangüardia radical, cocina de vanguardia que ha llegado a la gente muy rápido gracias a los medios de comunicación, pero lo que se hace en El Bulli es algo que la mayoría de la gente entenderá dentro de veinte años, porque no tiene nada que ver la cocina tradicional con la alta cocina de vanguardia y de investigación.
Para las pymes resulta difícil y muy costosa la innovación y la publicidad, pero les demostraré que no lo es tanto: en mi restaurante, una pyme, se han realizado audiovisuales con gente joven, con poco experiencia pero con mucho talento, a un coste muy bajo, y estos audiovisuales hubiesen costado cantidades astronómicas con una agencia de publicidad. Esto es un mensaje hacia las pymes, para que no den por imposible innovaciones y medios publicitarios creyendo que solo las grandes multinacionales pueden llevar esto a cabo.
Otro ejemplo es el diseño industrial que tiene El Bulli, que comenzó en el año 2000 con un ingeniero suizo con poca experiencia. En 2003 llegamos a ir a la exposición de París con Vodafone, Ferrari y grandes diseñadores industriales. Lo que admiraban era como un restaurante podía llegar a diseñar más de cien piezas de cocina con nuevas funciones, piezas que más tarde se han comercializado con diseñadores españoles a través de una empresa externa.
A priori parece que las pymes no pueden abarcar determinados campos, pero les diré que, al menos en el mundo de la hostelería, creyendo en ello al final se pueden llegar a conseguir los objetivos soñados sin la necesidad de realizar una gran inversión.